DISCOS:

- “Back to black” de Amy Winehouse: El disco mainstream del año pasado. Por fin un disco de R&B inspirado, moderno y clásico a la vez, bien producido (sin ese lavaje blandengue del que muchos suelen hacer gala) y adictivo a rabiar. Y aunque del tema 8 al 10 a Amy medio como que le afanan los estribillos, el resto del disco es anti-skip: cada tema se zambulle en una influencia y la saca a flote en estado de verdadera gracia. Agradezcamos, entonces, a esta chica y a su productor (el efectivo y sabiondo Mark Ronson) por un mas que digno rescate de la buena música pop negra.

- “The Good the Bad and the Cuddly” de The Bicycles: No hay disco nuevo (y con nuevo me refiero a un período de tiempo que podría abarcar el último lustro) mas entrañable que el de las bicicletas. No hay canciones pop mas queribles y emocionantes que “I will appear for you”, “Australia” y “I know we have to be apart”. No hay mejor manera de combinar la historia del pop en su conjunto que la que se utiliza en este disco. “The good the bad…” podría (debería) haber sido el mejor disco del año pasado: solo su escaso interes en hacer foco y su desfachatado y desordenado hedonismo por las melodías le juegan un poco en contra… o a favor, eso dependerá de quien (y como) lo mire. El mejor descubrimiento del año pasado, sin dudas.

- “Lady`s Bridge” de Richard Hawley: Lamento profundamente haber despotricado contra “Coles Corner”. ¿Cómo pude haber sido tan imbécil? El tiempo terminó enrostrandome la belleza de ese disco que se parece a un “best of” de lo bueno que es. Con este antecedente no me queda otra que resarcirme hablando loas de “L.D”. Igual, no le estoy regalando nada: canciones como la devastadora “Valentine” (y su recargado y sublime camino de cuerdas), la engañosamente apacible “Roll river roll” (y su preciosa linea de piano), el hit “Serious” (parece tan facil componer una canción así!!), los superhits “Tonight the streets are us” y “I`m looking for someone to find me" (sus melodías deberían estar en el silbido de cada uno de los seres de este planeta), y las oscuramente bellas “Lady`s bridge” y “Our darkness” hacen del disco un lugar mejor en el mundo horrible e insensible (a la buena música) que nos tocó sufrir.