OJEANDO CLASICOS MAINSTREAMS:

"TAPESTRY" DE CAROLE KING:
A riesgo de sonar burgués, toda rutina bien llevada puede provocar una deliciosa embriaguez, una corriente fluida que la anarquía no es capaz de generar. Aunque se descarte al Rock como sinónimo de caos (la aceptación, el mainstream Y el marketing de la rebeldía niegan esta analogía) uno no puede dejar de admitir que hay ciertas músicas dentro de este género que suenan desfasadas, libres y, a la vez (y eso es lo bueno), repulsivas al gusto FM-MTV medio. Bueno, la susodicha (C.King) es todo lo contrario. No hay nada mas previsible que las melodías que inundan "Tapestry". Pero hay pocas más placenteras que muchas de ellas. Todo está asquerosamente en su lugar. No perdón, todo está perfectamente en su lugar: la voz, la ejecución, los arreglos, nada genera un fucking sobresalto. Todo parece estar bajo control y en ese respeto a un libreto hay mucho de inspiración y poco de asfixia. Es algo que conocemos, y es ahí, precisamente -en ese "conocer"-, en donde encontramos el pecado: esa "falta" que nos autoimpone una sordera y que impide un disfrute "obvio". La puta madre, ¿cómo algo puede generar tanta repulsión y tanto placer a la vez?. Será que el tiempo pasa y la rutina, con sus quiebres y sus fugas, pasa a ser una de las pocas opciones posibles para seguir jugando para el equipo de los sanos. No sé. Lo que si sé es que hace unos años me hubiese parecido imposible disfrutar de algo tan standard. Por suerte hoy estoy más viejo y todo me chupa un huevo. Si eso no es aburguesamiento el aburguesamiento donde está...