DISCO DEL AÑO:

Interrumpimos nuestra transmisión ("... en castellano") para anunciar el que, a mi atrofiado entender, debería ser considerado Disco del Año: "Sing along with..." de los Acid House Kings.

Algunas impresiones apuradas y emocionadas:

Es una tarde soleada y es una tarde gris. Es todas las tardes: a pesar de eso, en su música las nubes no existen o no creemos que existan -como Merrit no creía en el sol.

Es el color pastel adormeciendo el subconsciente y convidando a sonreir como un perfecto idiota.

Es la levedad. Es la nostalgía de una no-pérdida. Es la esperanza de una no-realización.

El Mundo sería distinto sin ellos... y con ellos en el lugar de Coldplay!!

La realidad también sería distinta sin ellos: no habría tal escape (se podría decir que su existencia es una utopía inversa, toda vez que con este término -utopía- afirmemos que "no hay tal lugar").

Y algún día (y sí.. ¿por qué no?) se combatirá la depresión (y quizás todos los males) con este disco.