2 DISCOS 2 (Gracias totales!!!)

La puta madre, ¿por que mierda tengo que encarar una crítica (un suma x de palabras, el término “crítica” me queda grande, muy grande)... de vuelta, ¿por qué mezclo sistematicamente la emoción que me provoca un buen disco con la necesidad de pedir perdón por las líneas escritas en torno a esa emoción?, ¿Culpa por tomarme tal atribución? ¿Miedo a quedar en ridículo? No creo que las respuestas afirmativas a tales interrogantes me influyan lo suficiente pero... algo de eso hay. Anyway, la idea inicial de escribir en un blog era intentar una forma de agradecimiento para con las obras artísticas que me movilizan o me violentan (en este último caso la gratitud dejaría espacio al insulto más vil). Dicho cimbronazo estético no me permite mantenerme pasivo e indiferente: el arrebato emocional deviene en urgente obligación por difundirlo. Una, si se me permite, loable intención de que alguien más –movido por lo que se describe- tome conocimiento, primero, y vivencie, después, el mismo -o parecido, o mejor- instante extático; aquel momento de roces de fibras sensibles que le agrega sentido a un mundo y a una vida que ofrece pocos. Demasiado pretencioso, dirán algunos. Puede ser, pero a mí me gusta verlo con otros ojos (no más humildes): la ingenua utopía de contribuir a hacer de este "un mundo mejor" tiene su (infructuoso) correlato en esas (estériles) reseñas.

Hoy le tocaría el turno a dos discos que se me volvieron tozudas obsesiones en estas últimas semanas: "Illinoise" de Sufjan Stevens y "Funeral" de The Arcade Fire. Pero no puedo hablar mucho de ambos porque caería en la mas obscena lisonjería, casi en una pornografía del review. Solo decir que haciendo un rápido paralelismo, si Badly Drawn Boy es para la música lo que Riquelme para el futbol, Sufjan Stevens sería Ronaldhino: así de simple y brillante es su arte. Y que el disco de The Arcade Fire se me ha transformado, con el correr de las escuchas, en un disco-paradigma. Solo basta poner play y la explicación de porque hay poca música así, salta a los oídos: en la actualidad ya no se hacen canciones con ese nervio, con esa tensión, ya no se oye un compromiso drámatico tan vital como el de esta banda. Aprendices, aprendan.